En general un viaje en avión con un bebé no tiene restricciones. Sin embargo, algunos profesionales aconsejan no hacerlo antes de los 7 días de nacido; estaría mejor si tiene de 10 días a dos semanas.
Una de las principales preocupaciones es que el bebé se contagie de gérmenes en un lugar tan cerrado como el avión. Consulte con el pediatra, pues él será quien le indique, de acuerdo con la salud de su bebé, si es oportuno un viaje en avión en sus primeros días de nacido.
Recomendaciones
• Para tener un viaje placentero, debe planearlo con anticipación. Esto le dará la oportunidad de elegir las sillas de adelante que ofrecen espacio para ubicarse, así tendrá mayor comodidad y tranquilidad.
• También debe tener en cuenta la duración del trayecto y el clima del destino elegido; así sabrá qué y cuánto tiene que llevar a la mano en comida, ropa, pañales, elementos de higiene y medicamentos que pueda llegar a necesitar.
• Aunque las aerolíneas tienen restricciones respecto a los productos que se lleven en el equipaje de mano, cuando se trata de un bebé la comida y sus medicamentos son aceptados sin ningún problema.
• No está demás que esté prevenida con posibles cambios de clima que haya en el lugar al cual se dirige. Lleve la ropa extra del bebé que pueda necesitar para contrarrestarlo.
• Como la presión del avión puede alterar los oídos del bebé, es aconsejable darle un chupo o el mismo biberón, de manera que mientras chupa evitará que se le tapen los oídos y que surja el dolor que esta le llegue a producir.
• Para evitar que el aire seco del avión deshidrate a su bebé lleve agua, jugo y leche para darle durante el vuelo.
Como se dará cuenta, es muy diferente viajar con un bebé en avión. Son muchos aspectos que hay que tener en cuenta, pero esta primera experiencia será una nueva oportunidad para compartir un recuerdo más con el bebé mientras llega a su destino.
¡Feliz viaje mamá! ❤